Al volver de nuestra salida Del Pirineo a la playa, cerca ya de mi tierra, Navarra, pasamos el día en Murillo del Gállego:
Tierra ya bastante conocida pues hemos estado en Huesca, San Pedro el Viejo, Catillo de Loarre, Castillo de Montearagón y el románico de Aguero.
No habíamos parado en este pueblo Murillo de Gállego: admirable sus calles empinadas… pero sobre todo sus vistas de los Mallos en todas las direcciones. Magnífico el río: bravo y bien explotado en deportes de rafting…Y maravilloso el arte y la historia que hace imaginar los tiempos medievales: principios del Siglo XI, Pedro I rey de Aragón y el «Reino de los Mallos» de Dña Berta, su segunda mujer.
La descripción de este románico en su realidad actual y en su evolución histórica se puede encontrar amplia y bien ilustrada en el romanicoaragonés.
Sólo algunos detalles:
Mis impresiones fueron profundas: los exteriores son altivos, extraordinarios… la piedra bien tallada, magnífica. Los capiteles y canecillos dignos de verlos al detalle, pero ¡con prismáticos!. Agüero está cerca, Loarre…Huesca capital y hasta Uncastillo. Y su interior ¡¡¡la cripta!!!: todo un mundo antiguo, misterioso, aunque un poco a falta de actualización.
Los paisajes son sólo para contemplarlos:
Ya se pueden ver algunos detalles más en mi álbum Románico de San Salvador de Murillo de Gállego.
Me queda por acercarme a Riglos, al pie de sus Mallos.